Consiste en un soporte que suele ser de metal (aunque también los hay de madera) que tiene unas láminas transversales de madera o de otros materiales.
De tapa rígida o tejido transpirable, ofrecen mucha firmeza al colchón y a nuestro descanso.
Disponen de un gran almacenamiento en el interior de la base, suelen tener un mecanismo de apertura vertical sencillo.